La zona mediterránea de la Península se ha visto muy afectada por la plaga del picudo rojo. En la Región de Murcia, por ejemplo, muchos ejemplares han tenido que ser retirados con el fin de evitar la propagación de esta plaga. Desde el año 2006 hasta 2009, en Murcia se arrancaron más de 4.500 palmeras, según la Consejería de Agricultura y Agua murciana y trató más de 200.000 ejemplares afectados mediante insecticidas autorizados. El coste total de las actuaciones fue de 5 millones de euros.
En Catalunya, otro ejemplo, la Generalitat ha publicado los efectos del picudo rojo: desde 2005 hasta diciembre de 2009 se han visto afectadas 5.000 palmeras, siendo la comarca costera del Maresme la más afectada, con más de 2.600 ejemplares.
En Valencia, a principios de este 2010 el picudo rojo llegó hasta las puertas del Jardí Botànic de la Universitat de València.
Los parques públicos deberían realizar una campaña de prevención. Pero también los ejemplares de particulares deben tomar precauciones, pues la plaga se extiende con facilidad. Y sobretodo ahora en primavera.